2. María e Isabel |
|
1. Visitación de María a Isabel Por aquellos
días, María se levantó, y marchó deprisa a la montaña, a una ciudad de Judá; y
entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. Y en cuanto oyó Isabel el saludo de
María, el niño saltó de gozo en su seno, e Isabel quedó llena del Espíritu
Santo; y exclamando en voz alta, dijo: Bendita tú entre las mujeres y bendito es
el fruto de tu vientre. ¿De dónde a mí tanto bien, que venga la madre de mi
Señor a visitarme? Pues en cuanto llegó tu saludo a mis oídos, el niño saltó de
gozo en mi seno; y bienaventurada tú que has creído, porque se cumplirán las
cosas que se te han dicho de parte del Señor. (Luc 1,39-45) |