Creación del mundo |
CREACIÓN DEL MUNDO
Al principio creó Dios el cielo y la tierra. La tierra era informe y vacía y las tinieblas cubrían la superficie.
Quiso Dios que hubiera luz. Y apareció la luz. La separó de la oscuridad, y la llamó día. A la oscuridad, noche.
Después quiso que hubiera firmamento para separar las aguas de abajo, de las aguas de las nubes. Así ocurrió y al firmamento lo llamó cielo.
Luego quiso que se juntaran las aguas de debajo del cielo, y que apareciera lo seco. Así sucedió, y a lo seco lo llamó tierra. A las aguas reunidas, mares. Y añadió: “Que de la tierra nazca hierba verde con semillas y árboles con fruto.” Y así fue.
Más adelante quiso que en el firmamento hubiera sol, luna y estrellas, para separar el día de la noche, y que sirvieran para medir los días, las estaciones y los años. Y aparecieron.
A continuación Dios creó los peces, las aves y los animales de todas las especies.
Por último dijo Dios: “Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza, para que domine sobre todo lo creado.” Y creó al hombre y a la mujer.
(Génesis 1)
(Texto adaptado por D. Samuel Valero. Biblia infantil. Editorial Alfredo
Ortells, S.L. Valencia. pág. 22)
Juego de palabras |