Yo soy un Ordenador. Me pongo con mayúscula, porque
me gustaría
ser persona como tú para poder hablar contigo. Digo que soy un Ordenador
y no puedo ser más que un Ordenador. Y nada sería, si no me hubiera creado
un ingeniero electrónico y alguien me hubiera instalado un sistema
operativo y un programa. Es decir que me han creado, y tengo que ser
aquello para lo que me han
hecho. No puedo ser otro, ni perfeccionarme por mi mismo.
Tú, en cambio, eres una persona humana. Y, aunque tenemos en común que también
a ti te han creado, las diferencias entre tú y yo son abismales.
¿Sabrías decirme en qué consiste tu superioridad?
A ti te han creado "inteligente" y "libre"; capaz de
conocer, de razonar, de tomar decisiones por ti mismo. Este es tu ser que no
puedes cambiar: siempre serás
persona. Pero, por ser persona, tienes infinitas
posibilidades de perfeccionarte ¡o de deteriorarte! Quiero decir que en
tus manos está la decisión de "elegir tu propia manera de ser".
Puedes elegir entre ser:
Responsable o
......Irresponsable
Amigo........o.......Enemigo
Leal.........o.......Traidor
Fuerte.......o.......Débil
Constante....o.......Voluble
Obediente....o.......Rebelde
Sereno.......o.......Nervioso
Sincero......o.......Hipócrita
Sencillo.....o.......Amanerado
Ordenado.....o.......Caótico
Comprensivo..o.......Intolerante
Trabajador...o.......Perezoso
Sobrio.......o.......Borracho
Generoso.....o.......Egoísta
Justo........o.......Injusto
Prudente.....o.......Atolondrado
Audaz........o.......Timorato
Pudoroso.....o.......Grosero
Alegre.......o.......Triste
Vuelve a leer la columna de la izquierda. Lee ahora la de la derecha.
Estás en disposición de elegir.
¿Por cuál te decides?
Si has elegido la columna de la izquierda, sigue con el programa.
Quiero ayudarte a ser un hombre cabal.
Te has decidido por los valores permanentes y propios de toda
persona humana. La conquista de estos valores tiene que ser la razón de
todos tus esfuerzos. En definitiva, se trata de alcanzar la plenitud de tu
personalidad.
Debo advertirte que avanzar en una de estas
virtudes es
avanzar en otras muchas. No
existen solas; se interrelacionan. Unas
se apoyan
en otras. ¡Adelante, que vale la pena!
Si has elegido para ti la columna de la derecha, apaga
el ordenador; pero te diré
que eres un loco o un tonto o un monstruo. ¡Pobre humanidad!
Don Samuel Valero
Instrucciones: Pulsa uno de los botones
con las letras a, b y c. La letra acertada se pone de color rojo.